Elena Rybakina, quinta clasificada en la WTA, demuestra una marca única de lealtad en medio de la turbulencia que la rodea. Cuando el mundo del tenis le dio la espalda, Rybakina optó por apoyar a su ex entrenador, quien se ha visto envuelto en una controversia. A pesar de reunir un nuevo equipo de entrenadores, continúa brindando su apoyo al hombre fundamental en su ascenso a los cinco primeros en el tenis femenino. Este acto plantea preguntas: ¿Es la lealtad o la controversia lo que guía su decisión?
Antes del US Open 2024, Rybakina puso fin a su relación profesional con Stefano Vukov, su entrenador de toda la vida, en medio de críticas por sus supuestos métodos de entrenamiento duros y poco convencionales. La separación siguió a un incidente particularmente tenso en los cuartos de final del Abierto de Miami del año anterior. A pesar de ello, Rybakina nombró a Goran Ivanisevic, entrenador de Novak Djokovic, para su equipo. Sin embargo, en un giro sorprendente, anunció el regreso de Vukov para la temporada 2025, incluso cuando enfrentaba una suspensión de la WTA por presuntamente violar su código de conducta.
La controversia en torno a la suspensión de Vukov hizo poco para disuadir el apoyo de Rybakina. Ella reconoció abiertamente su importancia en su carrera, atribuyéndole la orientación tanto dentro como fuera de la cancha desde sus primeros días en el tenis profesional. Con Davide Sanguinetti uniéndose a su equipo de entrenadores, Rybakina encontró formas de mantener la influencia de Vukov a pesar de su incapacidad para unirse a ella en las canchas de práctica.
Rybakina ha mantenido una perspectiva positiva sobre Vukov, enfatizando el papel fundamental que desempeñó en sus años de desarrollo y sus éxitos colectivos, incluida su primera victoria de Grand Slam en Wimbledon en 2022 y otros títulos de la WTA. A pesar de las controversias, valora la asociación que compartieron.
Sin embargo, no todos en la comunidad del tenis comparten la perspectiva de Rybakina. Coco Vandeweghe, en particular, expresó su preocupación por el comportamiento de Vukov, sugiriendo que tales incidentes levantan banderas sobre su estilo de entrenamiento. Los comentarios de Vandeweghe reflejan un escepticismo más amplio con respecto a la metodología de Vukov y su impacto en Rybakina.
A pesar de enfrentar una reacción violenta, el apoyo inquebrantable de Rybakina a Vukov subraya la profundidad de su relación profesional. Si bien desde entonces se han separado en su acuerdo de coaching, el respeto y el apoyo mutuos entre ellos persisten, lo que subraya que los lazos profesionales pueden resistir la controversia.